La familia es una institución social más importante. Según la Real Academia Espñola (RAE) es un grupo de personas emparentadas entre sí que viven juntas. Sin embargo, a veces acaba siendo uno de los núcleos en el que se pueden sufrir agresiones. Esta violencia que se produce dentro de las familias se considera un asunto de salud pública que precisa sensibilización y concienciación por parte de la sociedad.
La violencia doméstica es aquella ejercida en los casos de convivencia familiar por parte de un miembro contra otro, contra algunos o contra todos ellos. Comprende la totalidad de los actos violentos en el seno del hogar, tanto los físicos como el acoso o la intimidación. Es, por tanto, un término que incluye varios fenómenos, entre los que se encuentran estos.
Está contemplada en el Código Penal en su artículo 173.2. En consecuencia, no requiere ley específica.
Las personas que sufren este tipo de maltrato están unidas por una relación familiar y el sujeto pasivo y el sujeto activo pueden ser tanto mujeres como hombres. No es necesario que víctima y maltratador convivan para considerarse cometido un delito de violencia doméstica. Este delito puedes sufrirlo con independencia de tu sexo, educación, posición social, etc. Pueden ser víctimas de violencia doméstica todas estas figuras:
Si crees que puedes estar sufriendo violencia doméstica, debes pedir ayuda. Es aconsejable que te apoyes en una persona amiga o familiar que merezca tu confianza de cara a los pasos que tendrás que ir dando.
Estos son:
Todos los ciudadanos que conozcan la existencia de una situación de malos tratos están obligados a denunciar.
Cuando son menores los que la sufren, resulta fundamental la labor que realiza denunciando la situación de maltrato de la que son testigos:
Una situación de maltrato es denunciable por cualquier persona que haya sido testigo, sin necesidad de que sea la víctima la denunciante. Pueden denunciar familiares, asociaciones, servicios públicos y cualquier ciudadano.
Resaltaremos la importancia de los Grupos de Apoyo a Víctimas de Violencia Doméstica. En ellos puedes encontrar ayuda cuando eres víctima, bien con acompañamiento para presentar denuncia o bien como personas que te comprenden y te escuchan, además de darte información. Hay asociaciones de ayuda a víctimas que cuentan entre su voluntariado con profesionales que prestan apoyo jurídico y psicológico.
En la violencia doméstica, la víctima y la persona maltratadora están unidas por una relación familiar. La maltratadora puede ser hombre o mujer. Hemos visto que cualquiera que haya sido testigo de una situación de violencia debe denunciarla.